Re: Videojuegos
Publicado: Mar, 21 Mar 2017, 20:33
Viene siendo la definición de los juegos de Paradox, si te gustan Os cuento dos de mis partidas favoritas para que veáis, quienes no lo conozcáis, lo glorioso del juego emergente.
La primera campaña que hice, jugué con los duques de Aquitania. Francia tiene la ley sálica como ley sucesoria, así que nunca hubo ninguna reina. Un par de generaciones después de comenzar, casé al duque con una princesa francesa. Después de alguna guerra civil, Francia estaba muy debilitada y yo harto de no poder cambiar la ley sucesoria a primogenitura, porque es cansino repartir tus tierras entre los hijos y tener que reconquistarlas. Cuando murió la princesa años adelante, dio la casualidad de que Francia estaba en una regencia y yo había heredado derechos sobre el trono débiles, lo cual supone necesitar momentos así para poder reclamar el trono. Pero en aquel momento tenía una duquesa, Ermesenda. Después de una guerra épica, Ermesenda se convirtió en Ermesenda I de Francia, la Grande. La única mujer que ocupó el trono francés
Otra de mis favoritas fue con los condes de Provenza. Mi objetivo era reconstruir el Reino de Borgoña. Poco a poco, desde dentro del Imperio fui mordiendo las tierras vecinas por sus condados hasta ir aglutinando los territorios de iure del reino para crearlo. Incluso puede aprovechar alguna guerra civil francesa para tomar algún condado que me servía. Y pude crear el reino de Borgoña. Pero me pudo la ambición y me afané demasiado en independizarme de los emperadores en una de las numerosas guerras civiles. Pero apenas pude expandir el reino para afianzarlo. Intenté tejer una gran alianza internacional para defenderme de la eventual recuperación imperial. Pero no fue suficiente y, cuando los emperadores sometieron a sus señores rebeldes, posaron su mirada sobre mi jugoso reino y me aplastaron con decenas de miles de tropas más que las mías. Luego llegaba una expansión nueva y quería probarla, así que la partida se quedó ahí, con la casa provenzal arruinada y al borde de la extinción
Ah, y una anécdota muy graciosa. Jugando con Toulouse era rey de Sicilia. Tenía tres hijos. Uno era un gran conspirador y lo puse de maestro de espías. El primogénito heredó el trono y tenía un hijo ya, y además tenía el rasgo de genio, que es muy potente. Pero alguien lo asesinó. Al poco, murió el hermano del rey. Y los demás hijos del rey. Y, finalmente, el rey. El hijo menor se convirtió en rey de Sicilia de la manera más humana posible para la IA
Madre mía, me entran ganas de jugar otra vez
La primera campaña que hice, jugué con los duques de Aquitania. Francia tiene la ley sálica como ley sucesoria, así que nunca hubo ninguna reina. Un par de generaciones después de comenzar, casé al duque con una princesa francesa. Después de alguna guerra civil, Francia estaba muy debilitada y yo harto de no poder cambiar la ley sucesoria a primogenitura, porque es cansino repartir tus tierras entre los hijos y tener que reconquistarlas. Cuando murió la princesa años adelante, dio la casualidad de que Francia estaba en una regencia y yo había heredado derechos sobre el trono débiles, lo cual supone necesitar momentos así para poder reclamar el trono. Pero en aquel momento tenía una duquesa, Ermesenda. Después de una guerra épica, Ermesenda se convirtió en Ermesenda I de Francia, la Grande. La única mujer que ocupó el trono francés
Otra de mis favoritas fue con los condes de Provenza. Mi objetivo era reconstruir el Reino de Borgoña. Poco a poco, desde dentro del Imperio fui mordiendo las tierras vecinas por sus condados hasta ir aglutinando los territorios de iure del reino para crearlo. Incluso puede aprovechar alguna guerra civil francesa para tomar algún condado que me servía. Y pude crear el reino de Borgoña. Pero me pudo la ambición y me afané demasiado en independizarme de los emperadores en una de las numerosas guerras civiles. Pero apenas pude expandir el reino para afianzarlo. Intenté tejer una gran alianza internacional para defenderme de la eventual recuperación imperial. Pero no fue suficiente y, cuando los emperadores sometieron a sus señores rebeldes, posaron su mirada sobre mi jugoso reino y me aplastaron con decenas de miles de tropas más que las mías. Luego llegaba una expansión nueva y quería probarla, así que la partida se quedó ahí, con la casa provenzal arruinada y al borde de la extinción
Ah, y una anécdota muy graciosa. Jugando con Toulouse era rey de Sicilia. Tenía tres hijos. Uno era un gran conspirador y lo puse de maestro de espías. El primogénito heredó el trono y tenía un hijo ya, y además tenía el rasgo de genio, que es muy potente. Pero alguien lo asesinó. Al poco, murió el hermano del rey. Y los demás hijos del rey. Y, finalmente, el rey. El hijo menor se convirtió en rey de Sicilia de la manera más humana posible para la IA
Madre mía, me entran ganas de jugar otra vez